El sistema se basa en levantar edificaciones que cuenten con un gran aislamiento térmico y un riguroso control de infiltraciones que modera el consumo energético.

El vestíbulo de la sede del Colegio Oficial de Arquitectos Técnicos de Castilla-La Mancha en Albacete acogerá, hasta el próximo día 18, una exposición itinerante donde a través de 15 paneles se muestran distintos ejemplos de la técnica de Passivhaus desarrollado en nuestro país en los últimos años.

Como inauguración de la misma se celebró una jornada de presentación en el salón de actos del propio Colegio de Aparejadores, sito en la Avenida Isabel la Católica, 19, que introdujo su presidente, Eduardo Cuevas Atienza, Luis Antonio Martínez, vocal de Estrategia de la Plataforma Passivhaus. A continuación,María Rosa de la Iglesia Arranz, habló sobre qué es el estándar Passivhaus y por qué es óptimo para construir edificios de consumo casi nulo, y Cristina Romero Medina, delegada de la Plataforma Passivhaus en Castilla-La Mancha, se centró en su aplicación a la adecuada rehabilitación de edificaciones.

La cita concluyó con la charla de UrsinaMartínez Bargues, socia de la Plataforma Passivhaus y colegiada en el COAAT, ¿Cómo conseguirlo?: Plan de Ayudas a la Rehabilitación de Edificios y la presentación de la exposición Segundo Concurso Iberoamericano Passivhaus.

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El consumo de energía
en estas construcciones
se ve reducido en torno
al 70 por ciento.

Esquema de una vivienda proyectada con esta técnica.
/ PLATAFORMA PASSIVHAUS

EVOLUCIÓN. Este sistema vinculado a los sistemas constructivo más sostenibles se basa en levantar edificios que cuenten con gran aislamiento térmico, un riguroso control de infiltraciones, y una máxima calidad del aire interior, además de aprovechar la energía del sol para una mejor climatización, reduciendo el consumo energético del orden del 70 por ciento (sobre las construcciones convencionales).

Fue desarrollado a partir de numerosas investigaciones en la década de los años 90, con la financiación del Estado Alemánde Hesse, concretamente por Wolfgang Feist y Bo Adamson que aplicaron estos principios en una casa en Damstad y en la actualidad se ha extendido por el resto del mundo. Combina un elevado confort interior con un consumo de energía relativamente bajo y un precio asequible, gracias al máximo cuidado de la trama envolvente del edificio y a un eficaz sistema de ventilación controlada.

Los criterios principales del estándar son una demanda de calefacción igual a los 15kWh por metro cuadrado al año, una demanda de refrigeración de 15kWh por metro cuadrado, un consumo de energía primaria de 120kWh y otros parámetros de hermeticidad. Los valores característicos se calcularán para toda la envolvente térmica del edificio. El estándar dispone de una herramienta de cálculo, mediante la cual, introduciendo los datos requeridos, de manera exhaustiva, calcula y verifica el cumplimiento de los parámetros antes detallados. Se trata del programa informático PHPP, y se refiere a la superficie habitable neta de todas las estancias.

Fuente de la noticia el periódico «La Tribuna de Albacete»>